Comentario
La cuna del movimiento almorávide fue el extremo occidental del norte de África, al sur del actual Marruecos, y en su vertiente atlántica, en la desembocadura del río Senegal aproximadamente; por el este, se extendía hasta la actual Argelia. Surgió entre los miembros del grupo tribal de los Sinhaya, que se repartía la influencia en la zona con los Masmuda, principalmente, y con los Zanata. La islamización del extremo Noroeste de África, o al-Magrib al-Aqsa, la llevaron a cabo, a mediados del siglo VIII, las oleadas musulmanas que más tarde penetraron en la Península Ibérica, y siguió un proceso lento y desigual que introdujo la nueva religión con sus tres sectas principales: la sunní u ortodoxa, la si'í, partidaria de Alí, yerno del Profeta Mahoma, y la jariyí, cuyos adeptos se apartaron de las dos mencionadas. Como los almorávides siguieron la escuela sunní, en este trabajo sólo se hará referencia a esta doctrina que se fundamenta en tres pilares: al-Corán, la Sunna o tradición del Profeta Mahoma transmitida por los Hadices (relatos de todas las opiniones y actuaciones del Profeta y de sus compañeros), y el Ichma o consenso universal entre los musulmanes.La interpretación de estas fuentes doctrinales dio lugar al desarrollo de varias escuelas religiosas que, sin discrepar sobre los principios dogmáticos, sí se diferencian en los aspectos rituales y legales; de estas escuelas o madahib, cuatro son las más extendidas: la del Imam as-Safií, la del Imam Malik ibn Anas, la del Imam Abu Hanifa y la del Imam Ahmad ibn Hanbal. Cada una tuvo arraigo en algunas áreas del mundo islámico. La del Imam medinense Malik ibn Anas se implantó parcialmente en Egipto y sobre todo en Ifriqiya (actual Túnez), donde un grupo relevante de alfaquíes -a la cabeza del cual destacó el Imam Sahnun (m. 854) con su obra al-Mudawwana- mantuvo siempre la llama del malikismo encendida en sus centros de enseñanza, preparando a decenas de discípulos que la introdujeron en todo el Oeste y el Sur de África; al-Andalus siguió también la escuela malikí que fue el rito oficial desde la época de Hisam I; entre sus primeros imames destaca Yahya ibn Yahia al-Layti (m. 848).